Julio de 2020

En los mismos días en que estallaron las revueltas de los afroamericanos en los Estados Unidos contra la violencia policial, los riders brasileños, jóvenes y en su mayoría negros, en un esfuerzo ejemplar de auto-organización, proclamaron un día de paro de sus actividades y lograron la solidaridad y la participación de los trabajadores del transporte metropolitano de San Pablo y de otras categorías, de estudiantes, de movimientos y organizaciones sociales. Además, crearon una red de coordinación con riders de otros países latinoamericanos para converger en una movilización unificada e internacional bajo las consignas: «Nuestra vida vale más que sus ganancias«, «¡Todos tenemos los mismos derechos!», «¡Una sola clase, una sola lucha!».